Dónde?
Granada, junto con las provincias de Almería, Cádiz, Córdoba, Huelva, Jaén, Málaga y Sevilla comprende la región de Andalucía. Se trata de la segunda región más extensa del Reino de España, y es la más poblada.
Granada, más pequeña que su hermana sevillana, no tiene menos encanto, y se trata de una ciudad con gran movimiento de turistas nacionales e internacionales. Mundialmente famosa por la Alhambra, esa fortaleza árabe que hasta el día de hoy sigue sorprendiendo. Pero podemos decir que se trata del 50% de lo que hay para ver, porque la ciudad se complementa con otros paseos preciosos.
Hacía tiempo que queríamos ir a la triada mágica: Granada, Sevilla y Córdoba. Según decían allí se encontraba España, la auténtica y original, la que habla español, la que defiende la unidad española, pero también escuchamos algunos comentarios que los catalogan como vagos y poco trabajadores. Por esto, teníamos muchas expectativas y muchos prejuicios por derribar.
Cuándo?
Si bien habíamos estado en Andalucía en verano, decidimos solo pasar por la costa, y dejar las ciudades de Granada, Sevilla y Córdoba para hacer mas adelante. Porque? nos contaron que puede llegar a hacer 50 grados en la sombra y eso era algo que no estábamos dispuestos a comprobar!!!
Por eso, decidimos hacer este viaje en Noviembre.
Llegamos a Madrid el 2/11, y nos quedamos unos días en Soto del Real, donde siempre nos hospeda nuestra prima Lili, que nos esperaba con una hermosa chimenea a leña para calentarnos.
Cuánto?
Le dedicamos 3 días.
Nuestro recorrido
Desde Madrid volvimos a las andanzas pero esta vez en bus, pasando por Granada, Córdoba y Sevilla.
Arrancamos nuestro viaje el 6/11 desde Madrid Estación Sur de Autobuses. Tomamos el bus jugados de tiempo como siempre, pero al menos nos alcanzó para comprar unos cien montaditos que devoramos en el bus a pesar de estar prohibido comer adentro. Fue un viaje placentero, netflix y relajados pensando en nuestro destino.
Tras unas cinco horas llegamos a la Estación de Autobuses de Granada cerca de las 20hs. Como estaba un poco lejos del centro, tomamos un bus local hasta cerca de la habitación que habíamos reservado.
Alojamiento
Nos hospedamos en el centro histórico.
La ubicación fue ideal, porque desde ahí se puede hacer todo perfectamente caminando.
Llegamos a nuestra habitación en Cathedral Rooms and Houses.
Nos atendió un italiano en español, que nos llevo por tres pisos de escaleras hasta una pequeña habitación con una litera doble. Esta vez no fue como siempre, cambiamos y Julian fue arriba, Mar abajo, solo porque era muy baja la litera, siempre a conveniencia del señor, :P.
Tenía una ventanita desde donde se podía ver un poco de la ciudad. El resto del edificio era antiguo, pero funcional. Tenía cocina, duchas e inodoros repartidos por diferentes pisos.
Atracciones principales
La Alhambra
Granada es conocida como la ciudad de la Alhambra, fortaleza árabe que perteneció al Reino de los nazaríes. La Alhambra se puede visitar completamente por 14 euros. La mejor zona es la de los Palacios Nazaríes en las cuales se puede visitar la lujosa arquitectura que caracterizó estos imponentes edificios árabes, hechos para la perpetuidad. Hoy en dia se puede notar como el paso del tiempo ha hecho sus efectos sobre los colores originales, pues las diferentes decoraciones en yeso y otros materiales llegan hasta nosotros en color blancos, mientras que se puede distinguir en algunas partes sus colores originales azules y rojos.
Este coloso solitario se encuentra en lo alto de una colina dominando toda la ciudad de Granada, observandola desde allí. Se encuentra rodeado de preciosos jardines verdes y fuentes de agua que suelen usarse para agrandar la imagen de los edificios ya que se ven reflejados en ella.
Recorrer la fortaleza puede tomar unas tres horas o más, en nuestro caso entramos a las 9.30 y salimos a las 16, pero valió la pena cada minuto adentro.
Se encuentra dividida en diferentes zonas, pues como toda ciudad tiene su áreas designadas. Así encontramos los Palacios Nazaríes, la Alcazaba que era el área desde donde se defendía y vivían los militares pero también por donde el puebo que vivía fuera entraba a esta ciudad amurallada, por otro lado está el Generalife que era el lugar de ocio de los reyes musulmanes.
Dentro de los Palacios Nazaríes se destaca el Patio de los Leones, el Patio de los Arrayanes,
Palacio de Comares, Salón de Embajadores y la Sala de los Reyes.
Ir de tapas
En Granada cada cerveza tiene su tapa, como una combinación perfecta de sabores. Hay quienes te dejan elegir la tapa o quienes te recuerdan que es un regalo y por eso no se cambia. Y ¿que podés elegir? unas papas bravas, tal vez un plato de pescaitos, un calamarito, un chorizo, una albondiga, una pequeña hamburgesa, o una ensaladilla de mariscos, también suele estar el clasico jamón serrano. Todo siempre con un buen pedazo de pan. Entre dos y tres euros cada tapilla.
Nuestras noches fueron tapas y más tapas... por aquí y por allá, también más allá y por todas partes porque es el paraiso de las tapas. Los clasicos: La Antigualla, Bar la Rivera, La Bella y la Bestia (camino al Albaicin), Los Diamantes. Nuestro preferido: el vino de EntreBrasas con la carne a la parrilla, siempre tuvimos suerte que nos dieran esa tapa porque varía.
Recorriendo la ciudad
Fue imperdible una caminata por la carretera del Darro, que es un pequeño rio que corre en la ciudad. A sus márgenes se han apostado diversos locales de comidas y bebidas, y como no, de tapas. Al final de ésta, se encuentran diversos "palacios" de moriscos, adornados por el estílo árabe. Algunos son pagos como el Cármen del Chapiz (2,5 euros) pero solo se puede visitar el exterior ya que ahora el interior es parte de la universidad, esto hace que pierda bastante sentido su visita, lamentablemente no pudimos entrar al Cármen de la Victoria, Palacio Dar al Horra o el Palacio Cordova (gratuito), ello ya que tienen sus horarios especiales de apertura y cierre.
Si de miradores hablamos, Granada tiene algunos preciosos para pasarse un par de horas. Uno de ellos es el Mirador de San Nicolas, el cual tiene una vista privilegiada de la Alhambra. Con una cerveza allí y abrazados, pasamos una tarde para no olvidar jamás, siempre esperando que se prendieran las luces de la fortaleza árabe. Desde el Paseo de los Tristes se puede apreciar la altura en la que se encuentra el símbolo de la ciudad. Siempre se puede subir a alguna de las partes altas de la ciudad para poder apreciarla desde otra óptica.
Granada es un lugar para recorrer, caminar y perderse en sus calles, para encontrar calles como la de las teterías, donde a ambos lados se sirve el the al estilo morisco. Recorriendo se pueden apreciar las casas antiguas, adonarnadas por maceteros colgando en el exterior, también platos decorados.